No contentos con los injustos procesos judiciales que se siguen en contra de varios compañeros y compañeras por la resistencia de las comunidades a los megaproyectos de minería a gran escala, continúan las detenciones arbitrarias, intimidación, amenazas de muerte y agresión física de parte del Estado, el gobierno y los pro-mineros.
En esta ocasión han sido afectados en sus derechos humanos y constitucionales los compañeros José Gutama Paucar, de Molleturo, Vicente Zhunio Samaniego, Presidente de la Asociación de Campesinos de Limón Indanza (ACLI), y Fernando Mejía Reinoso, Presidente de la Coordinadora Campesina Popular de Morona Santiago (CCP).
Detención arbitraria, ilegal e ilegítima.-
El jueves 7 de mayo, más o menos a las 08H40, fue detenido por la policía en forma arbitraria, ilegal e ilegítima, José Salustino Gutama Paucar, mientras se trasladaba en un bus de transporte público de Molleturo hacia Cuenca. La detención se realizó en el sector donde se localiza la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Santa María en Sayausí.
Dos agentes de civil y tres policías procedieron a aprehenderle sin darle ninguna explicación, ni exhibirle ningún documento que justifique la privación de la su libertad. A empujones y torciéndole el brazo, como si se tratara de un criminal, lo llevaron al retén, sin responder a la reiterada pregunta de José Gutama sobre la razón de su detención. Tampoco le permitieron hacer llamadas, le negaron la comunicación con su abogado defensor.
En un patrullero fue trasladado desde la UPC de Santa María, a la Policía Judicial (PJ) en Cuenca. Posteriormente fue llevado al Comando de Policía, al despacho del Comandante Plácido Enríquez, quien tampoco respondió cuando José Gutama le preguntó el motivo de su detención. Luego de mantener una conversación, le dejaron libre, más o menos a las 10H30.
Este hecho inaudito no puede ser más que un acto de intimidación que forma parte de la persecución permanente que el Estado y el gobierno, así como los sectores pro-mineros, vienen haciendo en Molleturo, a fin de amedrentar a las comunidades para que no continúen su resistencia.
Intimidación y amenaza de muerte.-
El sábado 9 de mayo, más o menos a las 14H00, en la parroquia San Miguel de Conchay (cantón Limón de la provincia de Morona Santiago), donde el Teniente Político Hernán Samaniego, había convocado a las comunidades para una reunión con funcionarios de la minera Corriente Resources- ECUACORRIENTE-EXSA, miembros de la Asociación de Campesinos de Limón Indanza y de la Coordinadora Campesina Popular de Morona Santiago, llegaron para ejercer su derecho a la resistencia, mediante una manifestación pacífica en rechazo a la presencia de la mencionada empresa, cuyas concesiones deberían estar extinguidas en aplicación del Mandato Minero (Art. 1), pues jamás las comunidades fueron informadas, peor consultadas sobre la entrega de su territorio a las transnacionales para la explotación de minerales.
En marcha pacífica los manifestantes se dirigieron a las afueras del local donde se iba a realizar la reunión para un plantón y fue entonces cuando el Teniente Político de San Miguel de Conchay, Hernán Samaniego, con gritos e insultos impidió el paso al compañero Wilmar Fernando Mejía Reinoso, diciéndole que se fuera de allí, que se vaya a Gualaquiza, que no tiene porque estar en “su parroquia”, donde él estaba haciendo “su reunión”. Incluso la policía, que se encontraba presente en el lugar, intervino para tranquilizar al desaforado Teniente, ya que no había razón alguna para tal actitud.
Totalmente fuera de sí comenzó a insultar a los manifestantes y al identificar entre ellos a Joel Vicente Zhunio Samaniego, señalándole con el dedo le gritó “Eres hombre muerto”.
También estuvo en esta reunión un abogado de la minera, Patricio Delgado, quien el año pasado, a través de medios de comunicación de Macas y Cuenca, acusó a la compañera Lina Solano y Fernando Mejía de haber provocado hechos de vandalismo el 28 de agosto de 2008, presentándose como abogado de los supuestos agredidos, por lo que se abrió un proceso judicial en contra los compañeros en la Fiscalía de Gualaquiza. Allí estuvo defendiendo como buen asalariado a la empresa minera.
Estuvieron presentes además el Jefe Político del cantón Limón Humberto Vera, el mismo que estuvo al mando del piquete de policías que en forma arbitraria, ilegal e ilegítima detuvieron al compañero Vicente Zhunio el 5 de enero de 2009. Además estaba el Teniente Político de Indaza Wilson Brito, que es uno de los que acusa a Vicente Zhunio y otros compañeros y compañeras, según los partes de las investigaciones policiales dirigidos al Juez Cuarto de lo Penal, dentro de los injustos e infundados juicios que se siguen por sabotaje y terrorismo organizado.
Todas estas “autoridades” descaradamente andan de brazo con la empresa Corriente Resources-ECUACORRIENTE-EXSA, avalando estas reuniones donde los asalariados de la minera tratan de convencer a las comunidades campesinas de las “bondades” que les traerá la explotación del cobre.
Así queda evidenciada una vez más como las autoridades de gobierno en Morona Santiago están actuando a favor de las empresas mineras transnacionales y en contra de las comunidades, y es por ello, que comenzando por el propio gobernador Marcelo Valencia, llevan adelante una cruzada en contra de quienes levantan su voz contra la imposición de los megaproyectos de muerte.
Recordamos que estas autoridades y la policía fueron capaces de poner en grave riesgo la vida de nuestro compañero Vicente Zhunio al trasladarle herido, desangrándose desde Indanza a Macas, cuando fue injustamente privado de su libertad el 5 de enero. Sin embargo les vemos campantes, sin que hasta ahora hayan respondido por este acto criminal.
La justicia siempre es ciega, sorda y muda cuando nosotros pedimos sanción para los responsables de las agresiones sufridas, como las suscitadas en contra de compañeras del Frente de Mujeres Defensoras de la Pachamama.
Expresamos nuestro total repudio a estos hechos y exigimos poner fin a la persecución contra los defensores y defensoras de la Vida y la Soberanía.
EQUIPO DE COMUNICACIÓN DE LA CNDVS
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